Cruzar las trochas es un alto riesgo que corren los “caminantes” venezolanos

 

Pese al reciente anuncio del Gobierno de Colombia en el que quedó claro que, de momento, la frontera binacional seguirá cerrada, así como al sorpresivo despliegue de efectivos militares y de la Policía Nacional en el lado colombiano de varias trochas de Norte de Santander, miles de venezolanos prosiguen su periplo desde distintos puntos del país con el fin de llegar hasta territorio colombiano, para buscar mejores condiciones de vida. 

La secuencia de comunicados y anuncios oficiales por parte de voceros de ambos países, parecen no hacer desistir a quienes, en muchos casos con todo y familia, emprendieron el reto de ganar territorio colombiano, de donde muchos de ellos debieron salir tras la llegada del Coronavirus y la cuarentena, que prácticamente paralizó la economía. Un nuevo capítulo de los llamados “caminantes”, con todas las historias que ello implica, comenzó. 

Por años, las trochas han sido peligrosos focos de todo tipo de ilegalidad

En una breve información divulgada el sábado 17, el representante del Ejecutivo Nacional en el Táchira, Freddy Bernal, dijo que en los próximos días anunciarán el “tratamiento” que se les dará a los emigrantes que están dirigiéndose a Colombia. 

“Ellos están en todo su derecho, pero debe hacerse con ciertas medidas de control”, dijo el vocero gubernamental, a la vez que anunció que en una reunión en Caracas fueron tratados éste y otros temas fronterizos, por lo que en los próximos días dará a conocer los detalles de un “plan político-militar de control” que fue concertado con el Presidente Nicolás Maduro y representantes del alto mando militar. 

En las trochas binacionales operan grupos criminales como Los Rastrojos, La Línea y Los Pelusos, que libran una guerra a muerte por el control de la zona

“Caminantes” en avanzadas 

Mientras esto ocurre, los llamados “caminantes” siguen transitando en grupos por la capital tachirense. Es frecuente verlos por la Troncal 5 (carretera de Los Llanos), avenida Marginal del Torbes, subiendo por la vía hacia El Mirador y enrumbándose hacia Capacho. 

Una nueva oleada de caminantes venezolanos empieza a llegar a Colombia desde varios puntos del país

Otros, que prefieren ahorrarse el control militar de los primeros kilómetros de la vía que desde San Cristóbal los lleva a San Antonio, optan por continuar su recorrido por la autopista hacia Táriba, hasta el tramo desde donde cambian su curso hacia Peribeca y finalmente conectan con la vía principal, a la altura de Capacho. 

Colombia “alerta” 

La semana que terminó, voceros del Gobierno de Colombia como el director de Migración Colombia, Juan Francisco Espinoza y el Secretario de Fronteras de Norte de Santander, Visctor Bautista Olarte, tuvieron la responsabilidad de anunciar oficialmente que, al contrario de lo que se esperaba, los pasos fronterizos entre ambos países no serían reabiertos a partir del 1 de noviembre. 

La nueva oleada de caminantes que atraviesan las trochas se produce en plena pandemia del Covid 19

Ambos funcionarios indicaron que el principal impedimento para la reapertura es la persistencia de la pandemia del coronavirus, que afecta a ambos países. “No están dadas las condiciones… Sería una irresponsabilidad de nuestra parte abrir la frontera cuando no tenemos capacidad para enfrentar la crisis existente, que se puede agravar con la llegada masiva de migrantes”. 

El Gobierno de Colombia declaró que no reabrirá aún la frontera por no estar dadas las condiciones para recibir más migrantes venezolanos

Tomadas las trochas por la fuerza pública 

Operación “Muralla” es el nombre que el Gobierno de Iván Duque le dio al ejercicio de toma de las trochas que unen a los municipios fronterizos de Táchira y de Norte de Santander, que son los pasos clandestinos donde generalmente se desplazan los migrantes ilegales y suceden todo tipo de actividades irregulares. 

El Ejército y la Policía Nacional de Colombia patrullan desde el pasado miércoles las trochas de Villa del Rosario y La Parada. Foto: Mario Caicedo / EFE

Tras el madrugonazo del pasado miércoles, cuando ocurrió el despliegue de personal militar y policial, el comandante de la Trigésima Brigada del Ejército, general Ilvar González, dijo que las autoridades buscan evitar la migración y comisión de delitos por las trochas. “Se busca imponer la legalidad, sacar de la zona a esos agentes generadores de violencia que se encuentran en estas áreas y darle tranquilidad a los nortesantandereanos", añadió. 

Decenas de ejecuciones y masacres han ocurrido en los últimos años en las trochas fronterizas. Foto: Mario Caicedo / EFE

El riesgo de los caminos verdes 

Transcurridos los primeros cuatro días desde que tropas del Ejército y de la Policía Nacional tomaron posiciones estratégicas en los pasos clandestinos de los alrededores de La Parada, Villa del Rosario y El Escobal, desconocemos si sus acciones están orientadas específicamente a contener a los migrantes que intentan ganar por estas vías territorio colombiano, o si por el contrario, hay orientación de hacer frente a los numerosos grupos paramilitares que allí operan y siembran el terror diariamente. 

Las autoridades colombianas cuentan en sus registros a 1.7 millones de migrantes venezolanos y estiman que con la nueva oleada que empieza a llegar la cifra superará rápidamente los 2 millones

Para nadie es secreto que por las trochas no sólo pasa contrabando de todo tipo en ambas direcciones. Es de conocimiento público que allí operan varios grupos paramilitares que liberan una batalla sangrienta por controlar la zona, lo que les posibilita realizar todo tipo de actividad ilícita como tráfico de personas, narcotráfico, contrabando de gasolina, secuestros, sicariatos, extorsiones y en fin, un sinnúmero de actividades criminales por las que diariamente corre sangre en cada trocha, en las que han perdido la vida una importante cantidad de venezolanos y colombianos y muchos más han desaparecido sin dejar rastro alguno. 

Los caminantes son observados con frecuencia en las carreteras del estado Táchira rumbo a Cúcuta. Foto: El Pitazo

En grupos y ataviados con sus equipajes, son vistos con frecuencia los caminantes venezolanos

Con la esperanza a cuestas y cargados una vez más de ilusiones, grupos de venezolanos caminan hasta Colombia en busca de mejores oportunidades

Diario de Ciudadanía