El SIPEM se adueñó de fiestas, ruedas de prensa y otros saraos donde hubiese caña y pasapalos gratis
Por Luis Martín. - En la Caracas de la abundancia sobraba todo tipo de celebraciones rimbombantes anunciadas en las páginas sociales de la gran prensa, por parte de gremios, clubes y algunas familias acaudaladas. Acudían invitados, allegados y se le sumaban los arroceros, que se especializaron hasta invadir cualquier tipo de reunión, desde la más reservada hasta la promocionada por la high society caraqueña.